Hay una enseñanza en la vida que aprendemos una vez hayamos transitado por el camino de la humildad, del dolor, de la ansiedad de sentir, desear, tener.
Establecer una relación de autonomía y de autenticidad, con las personas, con las cosas materiales, es una cualidad que todos los seres humanos aprendemos en el dolor o en el gozo.
La relación que hacemos del desapego, es el dolor del abandono, ansiedad, el deseo de tener o querer.
No poder desapegarse de una persona, de un hábito, de una idea, de un objeto, de un País, lleva a establecer con ellos relaciones de posesión o de sumisión.
Mientras tanto, tu vida continúa... Infancia, adolescencia, madurez, vejez, Primavera, verano, otoño, invierno
Amaneceres, días, ocasos, noches.
Si decidimos acompañar nuestra vida, estar en ella, nuestra existencia seria mas armónica, de lo contrario nos estancamos, la vida no fluye naturalmente.
El apego a una relación, a una costumbre, a un espacio, a una actividad, a una idea, a una práctica……puede llegar a ser tóxico o disfuncional.
El apego traba nuestro andar por la vida, carga nuestro equipaje con lo innecesario y nos impide escoger el necesario. El apego es una actitud que nos deja encadenados al pasado.
El desapego es sostener nuestra libertad, permitiendo, también, ser libres a quienes amamos. El desapego no es abandono, por el contrario, es un acto de amor incondicional. Quien ama verdaderamente, deja libre al otro. “Te libero con Amor y me libero con Amor"
Desapego significa no DEPENDER de nada de lo que poseemos o de ninguna persona con la cual tenemos algún vínculo afectivo, no significa abandonar todo, no trabajar más o no desear nada material.
¿Imagina a una persona sedienta y otra que no lo está? ¿En cuál vez tranquilidad, seguridad, paz? Desapego es la “carencia de sed”
Desapego es… …el arte y la acción de soltar.
AUNQUE LA BUENA SUERTE SEA REGIDA POR EL CIELO,TU DESTINO ESTARA SIEMPRE EN TUS MANOS.
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